¿Qué es educar en casa?

En México la Educación en Casa es  relativamente nueva. Los primeros niños y jóvenes educados en el hogar (sin considerar los hijos de misioneros extranjeros residiendo en México)  comenzaron su instrucción en los 90’s. De ahí que, aunque  cada vez se ha vuelto más popular y muchos padres saben que quieren llevar a sus hijos a instruirlos en sus hogares, no se sabe el cómo hacerlo. Trataré de responder a la pregunta qué es educar en casa y algunas otras interrogantes comunes a las que muchos nos enfrentamos cuando comenzamos.

¿Qué es educar en casa?

Educar en casa es  cuando los padres toman la responsabilidad de la instrucción completa de los hijos fuera del sistema escolar y primordialmente en el hogar. Aunado a la responsabilidad, va la elección del contenido, los tiempos, horarios, método, etc.

¿Cómo se  lleva a cabo?

En varias ocasiones he visto las preguntas, ¿dónde puedo inscribirme para hacer homeschool? ¿dónde consigo el material?  Educar en casa no es un sistema alternativo al sistema escolar,  por lo cual no hay ninguna institución ni organización a la cual debamos afiliarnos.

La educación en el hogar va más allá de materiales de trabajo escolar, aunque sí se utilizan. Es una serie de  oportunidades  para instruir a nuestros hijos desde la mañana hasta la noche, en lo académico y lo más valioso, en la instrucción de la Palabra de Dios.

Deuteronomio 6:6-9 nos habla de cuándo es buen momento de enseñar.

“Estas palabras que yo te mando hoy estarán sobre tu corazón y las repetirás a tus hijos y hablarás de ellas ESTANDO EN TU CASA, ANDANDO POR EL CAMINO, Y AL ACOSTARTE Y CUANDO TE LEVANTES, y las atarás como una señal en tu mano y estarán como frontales entre tus ojos; y las escribirás en los postes de tu casa, y en tus puertas.”

La primera “materia” del día, en mi experiencia personal, es la instrucción Bíblica. Reunirnos en la sala, orar por unos momentos, leer la palabra de Dios y meditar en ella, comentando, reflexionando sobre eventos que conocemos en donde hemos visto el cumplimiento de estas verdades, es lo más importante. Este tiempo es el más valioso ya que su fruto trascenderá para la eternidad.

Después está el resto del conocimiento, que es bueno y deseable, siempre con la mira puesta en que sea útil para servir, no solo a nosotros sino también a otros.

La manera particular de llevar a cabo este aprendizaje se realiza de tantas formas distintas como familias hay. Dependerá de las edades de los niños, el enfoque de los padres, sus prioridades, habilidades y deseos.

Existen varios métodos que se usan para educar en casa, y que enlistaré sin pretender tener una lista exhaustiva.

1.- Escolarizado o Tradicional

Es el uso del formato y materiales iguales o similares a los que utilizan en las escuelas.  En México los libros de la SEP están disponibles en su sitio web y pueden ser descargados y utilizados. Algunos otros materiales conocidos disponibles en español son los de Vara y Cayado, ACE (Accelerated Christian Education), Publicaciones El Águila, Colegio Hebrón y Educazion.net, además de los que publican las editoriales Santillana, Trillas, etc. y que pueden ser encontrados en cualquier librería.

2.-  Desescolarizado  ( Unschooling )

Es la forma libre de aprendizaje en donde no hay una estructura rígida para que ocurra sino más bien se aprende según los intereses de los niños y sus padres a cada momento y con las vivencias diarias. Quienes hacen unschooling buscan aprender a través de paseos, visitas a museos, viajes, salidas al parque, actividades en la casa, etc.

3.- Estudio por Unidades ó Temas (Unit Study)

Una forma de trabajar con varios niños de varias edades es a través del estudio por unidades. Desgraciadamente no hay muchos materiales desarrollados en español disponibles para trabajar de esta forma así que quien quiere hacerlo debe crear sus propios materiales o bien utilizar los que hay en inglés. La idea básica es elegir un tema central y trabajar las distintas materias en torno a él, asignando a cada niño el trabajo de acuerdo a su edad. Por ejemplo, supongamos que se elige el tema de La Revolución Mexicana. Para lenguaje, los mayores harán una lectura en voz alta, quizá los más pequeños escriban el título en una hoja y hagan un dibujo, harán una lista de palabras nuevas para buscar sus significados en un diccionario, etc. Para historia, lo marcarán en su Línea del tiempo, investigarán qué otros acontecimientos ocurrían en distintas partes del mundo al mismo tiempo.  Para matemáticas, calcularán de acuerdo a las fechas leídas cuántos años duró esta lucha, resolverán problemas de comprensión sobre salidas y llegadas de trenes, cargamentos,  etc.

4.- Método de Charlotte Mason

Charlotte Mason fue una pedagoga de finales del siglo XIX y principios del XX quien creía firmemente que el niño es una persona que debe ser educada de forma integral, no solo en su mente. Ella define Educación como una Atmósfera, una Disciplina, una Vida.

La Atmósfera es el medio que rodea al niño, de tal modo que aprenderá de lo que se encuentre a su alrededor.  Con Disciplina se refiere a los buenos hábitos, específicamente hábitos de carácter. La tercera parte es Vida, que se aplica a lo académico y que ella creía debían ser ideas y pensamientos vivos, no solo datos  para memorizar.

Ella hace uso de lo que llama “libros vivientes” en lugar de los libros de texto, y hace énfasis en el uso de buena literatura, estudio de la naturaleza, arte, apreciación musical, además del resto de las materiales comunes. Utiliza métodos que buscan nutrir el amor por el aprendizaje y el reforzar buenos hábitos para toda la vida, no solo dar información.

5.- Ecléctico

Muchos padres han encontrado que la forma en que mejor pueden trabajar con sus hijos es utilizando un poco de distintos métodos, ya que dependiendo del momento y las necesidades se va ajustando y se vuelve muy enriquecedor.

En mi experiencia personal, el iniciar con un material del tipo escolar, quizá no tan rígido pero sí utilizado como guía, fue una buena forma de arrancar. Educar en casa es un cambio grande, ya que nosotros mismos fuimos a una o más escuelas y es la forma conocida de recibir instrucción, por lo que en mi caso fue de gran ayuda tener una guía en un principio, mientras Dios ha ido trabajando conmigo, equipándome con herramientas, conocimiento, algo de experiencia propia y mucha enseñanza valiosa de padres piadosos a través de las conferencias y convivencia con ellos.  Ahora me siento con más confianza y puedo ser más flexible buscando otras alternativas disponibles o creando unas nuevas. Me parece que es un fenómeno que nos pasa a muchos padres educadores en el hogar con el paso del tiempo.

Al comenzar siempre existe la duda, ¿estoy haciendo lo suficiente? ¿estaremos dejando huecos en la enseñanza de nuestros hijos? Ninguna institución ni metodología cubre TODO el conocimiento. Por supuesto que estamos dejando huecos, no se trata de llenar a nuestros hijos de información, sino de darles las herramientas para que ellos mismos vayan descubriendo y aprendiendo cada día a nuestro lado.

Nuestro mismo Señor Jesús nos puso el ejemplo de cómo enseñar. No se llevó a sus discípulos a un salón de clases a sentarlos 6 horas cada mañana durante 3 ó 4 años para que tomaran apuntes y entonces supieran qué hacer. Ellos anduvieron con él, lo observaban y aprendían de él y con él durante el tiempo que lo siguieron en esta tierra. ¡Nuestra labor como padres es de gran responsabilidad ya que de nuestro ejemplo aprenderán nuestros hijos!

Espero haber respondido a la pregunta qué es educar en casa. Es mi deseo que cuando esté en la presencia de Dios escuche las palabras “Buena sierva y fiel, en lo poco has sido fiel, en lo mucho te pondré, entra en el gozo de tu Señor”. Dios nos dé sabiduría para llevar a cabo esta labor.